Plantas de tratamiento de aguas residuales para municipios

En las plantas industriales, a menudo se acumulan aguas residuales de estructura municipal procedentes de los comedores e instalaciones sanitarias de los edificios de producción y oficinas. Estas pueden tratarse por separado para recibir agua de calidad en sistemas de tratamiento especialmente diseñados y compactos.

Una de las características de las aguas residuales municipales es la afluencia intermitente a la planta de tratamiento. A lo largo del día, los volúmenes de entrada varían mucho y también pueden diferir en su composición. En los alcantarillados donde el agua de lluvia se mezcla con las aguas residuales domésticas, estas fluctuaciones son particularmente grandes.

Además de una elevada carga de compuestos orgánicos, las aguas residuales municipales suelen contener también cantidades comparativamente grandes de sustancias gruesas (desechos, residuos vegetales, arena). Como primer paso en el tratamiento de las aguas residuales, el agua se limpia mecánicamente mediante un rastrillo y se separa la arena contenida. A continuación, las sustancias orgánicas disueltas se depuran biológicamente en un tanque de lodos activados. Para respetar los límites de nitrógeno, la estimulación de la nitrificación y la desnitrificación es una práctica habitual en el tratamiento de las aguas residuales municipales.

Las fluctuaciones en la calidad y cantidad de las aguas residuales se minimizan mediante una balsa de ecualización, que se instala aguas arriba de la balsa de aireación. Para evitar la sobrefertilización del agua receptora, el fósforo existente se elimina de las aguas residuales. En función de la calidad deseada del agua limpia, pueden aplicarse otras tecnologías.